[Micro-excursiones] es un cuestionario que va en busca de escritores, con el fin de conocer sus ficciones personales. Es una adaptación, algo transgredida, del cuestionario Proust. Las preguntas son simples e impersonales, pero a la vez pretenden ser un disparador. Es el primer cuestionario en donde las preguntas no importan. El merito y la inventiva corre por cuenta de los escritores.

[Autosemblanza

Nací en 1972 en el partido de Vicente López, provincia de Buenos Aires, Argentina. Soy científico. Edito libros de no ficción y de ficción. Escribo y firmo con mi nombre poesías, cuentos, relatos, microrrelatos, crónicas, ensayos y artículos de crítica periodística de literatura, música y sociedad. También escribo críticas de arte, discursos, gacetillas de prensa, notas periodísticas, informes científicos y todo tipo de textos que salen sin mi rúbrica o con la firma de otro/s porque suelo vender mi fuerza de trabajo como “negro literario”/“ghostwriter”. Gestiono el ciclo de poesía oral Antropoético en la ciudad de Buenos Aires.

[Micro-excursiones]

1. ¿Qué condiciones se tienen que dar para que empieces a escribir?
No tener sed ni hambre.

2. ¿Cuál es tu héroe o antihéroe de ficción favorito?
Shevek, el protagonista de la novela “Los desposeídos” de Ursula Le Guin.

3. ¿Qué talento desearías tener?
El que desarrollan los ilusionistas (mago, prestidigitador).

4. ¿Cuál es tu posesión más atesorada?
Mi formación política adquirida entre los 16 y los 18 años.

5. ¿Cuál es para vos la manifestación más clara de la miseria?
El índice de indigencia.

6. ¿Cuál es la cualidad que aprecias en los seres humanos?
Que no sean semiágrafos.

7. ¿Cuál es habitualmente tu estado mental?
Esclarecido.

8. ¿Cuál es tu idea de felicidad?
Leer y escribir en una casa con parque y piscina con vista a un lago o río.

9. ¿Cuál es tu mayor miedo?
Le temo a la Gran Bestia Pop.

10. ¿Cuándo y dónde fuiste más feliz?
A los 16 años en Olivos, partido de Vicente López, provincia de Buenos Aires: entonces me convertí en el adulto ilustrado que más tarde perfeccioné.

11. ¿Qué libro que hayas leído te hubiera gustado escribirlo vos?
“Masas, caudillos y élites” de Milcíades Viriato Peña.

12. ¿Cuál es el peor libro de la última década?
Uno de los peores libros publicados en Argentina en las últimas dos décadas fue redactado en 1994 y tiene varias ediciones. La última que tengo a mano es de 2014, publicada por Editorial Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. El libro se llama “Constitución de la Nación Argentina”. Una de sus peores partes dice: “Artículo 2.- El Gobierno federal sostiene el culto católico apostólico romano.”

13. ¿Qué texto (cuento, poema o libro) no volverías a publicar? ¿Por qué?
Todo lo publicado lo volvería a publicar.

14. ¿Qué disco te hace sonreír?
“Word of Mouth”, segundo disco solista de Jaco Pastorius.

15. Si sufrimos un ataque de Godzila y tenés la oportunidad de salvar de sus garras a una banda o músico, ¿a quién salvarías?
A Juan Carlos Cáceres.

16. Si después de muerto volvés convertido en zombie ¿a quién morderías primero?
Si el destino me retrotrae a la Argentina de 1851, acorralo al nazi Juan Manuel de Rosas y luego invito a mi amigote zombie liberal Domingo Faustino Sarmiento a que él solito le dé una merecida paliza; si después Sarmiento me lo pide, muerdo al estanciero genocida y enseguida me lavo la boca con pervinox y alcohol y me administro varias dosis de amoxicilina de 1 gramo (y ahí le pido a Sarmiento que cuelgue al energúmeno en la Plaza de Mayo).
Si el destino me deposita en 1922 en Italia, invito al zombie revolucionario Amadeo Bordiga a que le dé algunos puñetazos en los pulmones al reformista Antonio Gramsci; si después Bordiga me lo pide, muerdo al jorobadito en la zona pulmonar y enseguida me lavo la boca.
Si el destino me deja en Alemania en 1928, le muerdo el cachete izquierdo del culo a Louise Brooks y no me lavo la boca.
Si el destino me lleva a Francia en 1960, beso a Anna Karina y de paso le muerdo los labios (y sigo sin lavarme la boca).
Si vuelvo convertido en zombie en 2015 a la Argentina, le muerdo las tetitas a la sueca Alexandra Larsson (y entonces sí posteriormente me lavo la boca).

17. En tu última obra ¿encontraste la palabra justa para decir lo que querías?
Sí, y viene a colación de los zombies: “eterno”. Con esa palabra termina el poema “la causa no prescribe porque es eterna: revisión del proceso sin sujeto ni fin(es)” que clausura el libro “un palito ortega por cada millón de tucumanos hambreados” publicado en 2014 por editorial Añosluz.

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