Ensueño, casi sueño.
Acunada por secuencias
de aceleración y freno.
Perezoso zamarreo.
Disimulo que me dejo, me dejo,
me desarmo,
me desojo,
con cada ensamblado tuyo
de cada sílaba tuya.
¿Me llevás a dormir?
Meceme en tu voz,
estoy a punto de caer en tu hombro.
NO SUSURES, QUE TE PIERDO.
Que tengo ganas de ser desnuda
para sentir mejor el verso
que empuja desde mi vientre.
Dejémoslo acá,
intuyo que no he de dormir
buscando ropa en la madrugada,
y todavía es muy temprano
para revelar zonas sensibles.
3 comentarios:
hasta "silaba tuya" te va introduciendo con lindos juegos de palabras, y de repente te tira un remolque de sensibilidad encima y te deja un poco mareado. es hermoso
desgarrando la hermosura del silencio.
aplausos.
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