Poesía Entre La Hierba es un ciclo audiovisual quincenal que busca retratar la intimidad de los espacios visitados por cada poeta en la puesta en escena de su obra, a través de la lectura, el aquí y ahora de la poesía, donde es posible percibir el grano más fino de la voz haciéndose lengua.
Esta vez retratamos a Antolín
leyendo “Turismo”, un poema que atraviesa las sombras de un recuerdo infantil,
donde se juega a las provincias como a una partida de Go. El personaje va a
asistir a la feria del colegio vestido de Neuquén, la provincia del viento y
las montañas por la tarde, que por las noches se vuelven sombras puntiagudas en
las ventanas tibias del pueblo. Ir desnudo y a pie aunque se esté vestido,
incluso disfrazado en trajes de goma espuma y polietileno, llorar formando ríos
imposibles sobre lagos del sur. El poema tiene mucho de eso y de andar a destiempo, buscando la forma que
encastre en el hueco sutil que arrima entre las líneas del poema. Vestirse de “algo”
codiciando una forma extrajera, domesticando la forma íntima,
esa menos decente: “soy un monstruo”, afirma la voz del poema, pero los monstruos nunca estuvieron de moda, y
aun si, si lo estuviesen guardarían en su existencia esa grieta que no
los ubica ni en lo bello ni en lo feo. La monstruosidad es una forma mínima de ambigüedad
que nos desnuda, destruyendo los disfraces de polietileno.
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