“canciones que son ventanas hacia la unidad”
(Tao de los de los acordes, disco Impecable A.B.)


El domingo 6 de septiembre Adrián Bechelli presentó el disco “Impecable” junto a su banda La Tezcatl orquesta mística: Luciano Paez (vientos), Gonzalo Martinez Valea (percusión) y Natalia Forastiere (voces), en el centro cultural Pachamama.
La presentación fue más allá de lo convencional. La escena brilló por la música y la poética de Adrián Bechelli, un autor de “espíritu tan libre como creativo” (en palabras de Pablo Grinjot) y por sus invitados, que lograron crear climas únicos.

La tarde transcurrió entre canciones inéditas que parecían mantras de pulso lento, y otras como “Palabra y marcador” (incluida en el disco) que dio a la puesta en escena un latido alegre y efusivo, culminando la noche con muchos talentos en un mismo escenario: Adrián y la mística Tezcatl y los invitados de lujo; Juanito el cantor, Tomi Lebrero, Pablo Grinjot y Alvy Singer. “El recital tuvo un tiempo propio. Salió algo que es nuevo. Está bueno, la despreocupación que Adrián tiene lo lleva a un lugar único” (Tomi Lebrero).
La poesía no faltó en el evento, estuvo a cargo de la perfo poética: “Nunca & Fin” y de la participación estelar de El rey larva (“en esta tierra sólo quedan tus huesos y la poesía”, afirmó El rey).
Bechelli no dejó que su yo-poeta se sienta intimidado por su yo-músico así que recitó “La bici con corpiño” y “La histeria” (de Poemas para volver a mí) acompañado del piano arremolinado y lúdico de Grinjot.
Otra destacada de la noche fue Natalia Forastiere por su voz dulce y su imitación en el ya “casi clásico” “Lo Infinito”; la muchacha encantó. Junto a la voz punk-zen de Adrián hacen de la heterogeneidad un condimento propicio para una obra “lateral y contracultural”.


Los que ya habíamos escuchado el disco nos encontramos con canciones reversionadas y muchas otras inéditas, algo rarísimo, porque generalmente en las presentaciones se tocan los temas del disco o canciones clásicas del autor. Pero en este caso el músico se excuso diciendo “no puedo parar de componer”.
Escuchar la propuesta de Bechelli en vivo es diferente a lo que uno esperaría de un show, pasan otras cosas que tienen que ver con las sensaciones y con la forma de transitar en el “aquí y ahora”, premisa básica para disfrutar de la consigna conceptual de este disco, hay que dejarse fluir.
En el vivo de este proyecto “hay una deconstrucción de la canción, Adrián tiene una banda que por momentos parece desarticulada, desarmada. Eso es algo que me interesa, como tratar de no poner el ojo en que todo suene prolijo y entre comillas, “como tiene que sonar“. Un poco para que se luzca el texto, me parece que ahí él encuentra algo. La melodía se desarma, no tiene el tratamiento tradicional de acompañamiento de canción, hay un juego donde las armonías y las melodías se empiezan a desdibujar. En momentos deja de tocar la guitarra, queda la percusión sola, hay cosas que desarman el discurso musical. Me parece un desarme positivo.” (Alby Singer)
Los invitados participaron en varios temas: Juanito el cantor, productor artístico del disco cantó y tocó la guitarra en “Palabra y Marcador” y “Multitrack emocional” temas de Impecable donde él también participa con guitarra, charango y voz. Alby Singer interpreto junto a la Tezcatl “Desvistiéndote”. Lebrero participó con voz y bandoneón, como lo hizo en el disco, en los temas punks: “Peyote de Calabaza” y “Nena con chupetín”.


Adrián Bechelli pasó por el escenario-living del “Pacha”, dejando en el público una sensación de sorpresa, algunos la podrán digerir y otros no tanto, pero la mística, la energía y la poética de este disco es innegable. Sacaran ustedes sus propias conclusiones (www.myspace.com/adrianbechelli). Si es que esperan algo único, que los sorprenda, escuchen este disco “fresco y deshilachado” (según Tomi lebrero), y a la vez “impecable”.
Porque Impecable no es sólo un nombre pomposo ni siquiera un adjetivo pretencioso, hablamos de impecabilidad cuando hablamos de un disco que no pretende, sino que existe y vive a la manera Bechelli.
Impecable porque es fiel a su autor, no se desdibuja, es unidad vida-música: “impecable/puse todo en cada gesto/ aquí y ahora/ cantar amar respirar”.
Está cargado de misticismo, de amor a la vida, de pequeños mantras, canciones punkiacarameladas, que sobrevuelan dentro y fuera del disco. La melodía es el juguete con el que el autor deconstruye y compone la canción-realidad-melodía.
Los instrumentos están agrupados de manera poco convencional: didgeridoo, quenas, clarinete, guitarra, percusión, bandoneón y piano. Por un lado elementos esencialmente clásicos y por el otro: instrumentos autóctonos, hacen que el disco de una vuelta de tuerca más, produciendo un sonido excéntrico y simple.
La poética es tan importante como lo musical, van a la par. Y en esto podríamos extendernos, pero simplifico el asunto, para que la poética hable por la poética, en palabras de El rey larva: “lo que tiene la poesía de Bechelli es aroma, perfume, roce, candor y todo lo que le hace a la belleza de los seres. Lo que nos gusta.”
Charlando con Juanito el cantor, productor artístico de Impecable: “De un artista me gusta que sea un tipo genuino, que sea el mismo, me gusta eso, que los artistas saquen afuera lo que sienten. En Adrián lo veo porque es espontáneo, es una persona que lo lleva arraigado y lo vive con naturalidad.”
En las palabras de Juanito está la clave para entender la obra de Adrián. Bechelli: es genuino, tiene mucho para decir y a la vez es responsable de lo que dice y canta, porque en su poética y en su música encontramos la visión de alguien que ama al mundo que lo circunda. Confía tanto en el amor de una “punki lesbiana” como en “que la vida se confunda con poesía” porque sus canciones son “ventanas hacia la unidad”… Un mensaje realmente impecable para este mundo, a veces tan violento como caótico. Porque la paz, el amor y la contracultura pueden ser formas alternativas de existencia. El disco Impecable es una ventanita más, que mira hacia esa otra existencia posible.

Nadia Caramella

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